Prof. Stefano Andreani | Prof. Carlos Sanchez Fuenmayor
Extracto de la critica del Prof. Stefano Andreani con ocasión de la exposición "Plenitud de las Substancias" que tuvo lugar en la "Casa de la America Latina" en Roma, Italia, en el año 1968. Publicado en el catalogo de la muestra.
Se suele decir, cuando se hace la "historia retórica" de un pintor, que en sus comienzos fue figurativo.
No nos debe sorprender: la capacidad de retratar, la voluntad de "hacerle justicia al ojo", es para el comprador y para el critico un elemento asegurador y también tranquilizante. Una cosa seria decir, que su obra es un empaste cromático cuando se conoce su practica naturalistica, y otra seria cuando revela la incapacidad de expresarse según una banal simbología reproductiva (la perspectiva por ejemplo).
Pero Dante Crosa, que hace todo menos empastes cromáticos, la figura esta en todo el comienzo, como la ritual vestimenta de Medea. Se liberara lentamente de ella, porque en la figura se había introducido puntillosamente con tonos de precision y de ordenada composición, todo ello apuntando a delimitar y a indicar, señalar lo particular, a detener, quizá, en manera ingenua, la agresividad.
Decimos agresividad porque la atención a la realidad, lo cuidadoso en retratarla son elementos antes que pictóricos sicológicos. El pintor se defiende de la realidad absorbiéndola completamente y replanteándola en un universo distinto, el del cuadro, que por sus limitaciones lo tranquiliza y lo satisface.
La crisis de lo figurativo es por tanto en todo pintor el momento de la verdad. Podrá replegarse sobre si mismo y hacer una fenomenologia cromática o seguir observando y reproduciendo lo real en manera libre y lúdica. Crosa, por suerte, ha escogido este segundo método.
En esta exposición en Roma, su primera personal en la Ciudad Eterna, se observan las conclusiones, se entiende momentáneas, de un largo trabajo. La materia se ha vuelto matriz primigenia, una nueva formulación o propuesta y un nuevo modo de retratar lo real.
Stevano Andreani
Roma, Julio de 1968
--
Extracto de la critica del Prof. Carlos Sanchez Fuenmayor a la exposición "Cosmodiastole" de Dante Crosa, efectuada en la Secretaria de cultura del Estado Zulia, Venezuela, en Mayo de 1991. Parte de esas obras se pueden observar desde el No. 1 al No. 5 del listado de obras.
Dante Crosa pinta a corazón abierto la armonía cósmica. En cada cuadro suyo hay un entorno natural de otras tierras, aguas lejanas, otros aires y otros fuegos dibujados con gran rigor conceptual y pintadas con fino tono poético de nuevo universo.
En la orbita de una abstracción total, la Cosmodiastole de este plural pintor se retorna a tres vertientes de la vida extraplaneta de la contemporaneidad: una lírica, reconocida en la resonancia de los tonos; otra realista, puesta en el gesto plástico de sentir los latidos de la creación y otro surrealista, donde la rítmica y la coloristica son direcciones encontradas en el recorrido visual.
Dante, ofrece un marco para una ideología comprensiva del futuro que no es de ficción sino de grandeza, donde los espacios poderosos son una especie de radiografía del infinito. El artista pinta una fuerza que se desborda como cualquier metáfora vitalista de la pintura. A estas comparaciones abstractas de lo que es grandemente concreto, sirven de afirmaciones y generalizaciones de lo inagotable, como la pintura vista desde la creación consecuente, que da lugar al humanismo que la vive y la protagoniza desde abajo, desde la tierra, como una historia para los seres vivos.
Para este artista, de raíces italo-uruguayas, llego la Era del Cosmos, que le rendirá culto a la vida del firmamento y al sentido de trabajo y de creación donde bulle la vida, vida que se prende de la existencia que puebla la materia plástica que marca el recorrido del arte.
Carlos Sánchez Fuenmayor.
Maracaibo 1991
Publicado en el catalogo de la muestra